VERANO


Centrar la atención y la intención en un punto es tan poderoso que podría compararse con lo que en el espacio se llama un agujero negro. Centra la conciencia en un punto y ahí está concentrado todo el poder de la intención que le puedas dar. Modular la energía solo tiene dos secretos: atención e intención; la energía sigue al pensamiento a través de la atención, un pensamiento no atento es un pensamiento desordenado, ahí no fluye la energía, pero cuando fijo mi atención en un punto, a ese punto va la energía, y con la intención le doy una dirección que puede ser de sanación, o de cualquier intención pura.

En un contexto de relajación, alineación física, emocional y mental, enfocas tu atención en un punto (el ahora, el presente) y le das una intención pura, sin expectativas. Tu concentración energética y tu intención pura son eminentemente creadoras y sanadoras. Perdemos poder y energía cuando no estamos en el instante presente, la mejor forma de carga energética es estar presente sin expectativas.

Cuando estás en el presente la vida es un juego, disfrutas la vida, pero cuando estás en el pasado o el futuro, la vida es una carga que hay que soportar, y la  primera condición de la espiritualidad es tener paz y disfrutar. Vivir cada instante como si fuera el último te da la oportunidad de vivir el siguiente como si fuera el primero, con lo cual se convierte cada instante en un presente único, se termina la rutina de la repetición. Haz la prueba: si caminas cada día por determinado sendero, camina hoy como si fuera la última vez que vas a pasar por ahí; si eres consciente te darás cuenta de todos y cada uno de los detalles del sendero, que, aunque has caminado por él muchas veces, hasta hoy no lo has visto ni sentido plenamente y mañana, cuando vuelvas a pasar, volverá a ser nuevo para ti. Has tomado conciencia y siempre todo es nuevo, estás de vacaciones sin habértelo propuesto.

Quizás en este momento estés preparando tus vacaciones, pregúntate ¿te propones disfrutar o huir? Siempre que estás en presente estás en vacaciones; si haces de tu trabajo un juego del presente, siempre estás en vacaciones, estás en paz, estás contigo. Si no estás contigo, puedes ir a donde quiera que vayas que no son vacaciones, son huidas de la carga que para ti significa vivir cada día y crees que preparando un viaje o yendo a cualquier lugar idílico, desaparecerá esa carga. Pero no es así, no busques refugios exteriores, no existen; los refugios que buscas son la expresión de tu reacción de fuga. Por el contrario, los refugios interiores son moradas, las moradas del alma, ahí están tus vacaciones, ahí es donde encuentras esa paz tan anhelada que buscas constantemente afuera. Por supuesto que las dos cosas no son opuestas, viajar en presente, en paz y sin expectativas. Observa tus respuestas. La mayoría de gente quiere huir de la rutina y coloquialmente se dice: "escapada", "desbloqueo", "desconectar"... pero ¿de qué? de la carga que significa para muchos vivir (o quizás sobrevivir) la vida sin coherencia, sin sentir el presente, con expectativas de conseguir algo que nunca llega y entonces convierten sus vacaciones en la rutina de cada año, hasta que algún día descubrirán la paz de su paraíso interior en cualquier lugar que se hallen.

Tu puedes visualizar el Tíbet o los Himalaya en tu presente y puedes sentirlos dentro de ti más intensamente que si estás allá con expectativas y haciendo fotos para contar que estuviste ahí de vacaciones. Abandona la cámara, cuando haces fotos no eres consciente del instante, ya que confías en que lo puedes ver más tarde, siente e imprime la imagen en tu corazón, si lo imprimes en tu corazón la imagen es para toda tu vida, si está en tu cámara, siempre necesitarás alguien que desde afuera te comente la jugada.

Todos los lugares y los tiempos son interiores en el código de la paz, la paz es respuesta de relajación y de presente, si no gozas no estás en el alma, si tu espiritualidad es esfuerzo, olvídate, eso no tiene nada que ver con la espiritualidad, la espiritualidad tiene que ver con tu coherencia y con lo que exprese tu nivel de conciencia en tu presente. Goza, has venido a gozar la vida.

En esta pausa veraniega, respira y vive el verano con plena consciencia.

Solsticio de verano el día 21 de junio a las 00:34h y, además, noche de luna llena: atención e intención pura.

Muchas gracias y buen verano a todos.