ESTO, TAMBIÉN PASARÁ


–... con la que está cayendo... –. Esta frase se oye ahora constantemente, pero ahí se esconden muchas justificaciones ya que el ser humano siempre ha buscado algo en lo que refugiarse, esconderse o justificarse y, así, distraerse de lo Verdadero.
Quizás, algunos de la clase dominante y poderosa puedan cometer irregularidades (por decirlo suavemente) con los intereses comunes, y eso parece que nos da vía libre a los demás para actuar de forma similar en pequeña escala; de esta forma sigue un encadenamiento de irregularidades sin fin, al que todos contribuimos; constantemente el
pez mas grande se come al más pequeño.
Naturalmente, eso está bien en los auténticos peces, pero el ser humano es depredador de sí mismo: si me pisan y no puedo devolver el pisotón, inmediatamente busco a alguien a quien pisar más fuerte y la justificación es: - todos lo hacen, con la que esta cayendo -, o algo similar.
¿De verdad nos creemos seres evolucionados? Los que estamos en la escala económica baja o media, ¿nos creemos mejor que los de arriba? No me refiero a vivir “mejor” o a tener más poder adquisitivo, sino a sentirnos mejor, con la conciencia en paz, sabiendo que siempre actuamos honestamente, pero, sobre todo, de acuerdo al bien común.
Si estamos en este lugar y en este momento, significa que nuestra vibración es acorde con ello. Aceptemos los hechos que no podemos cambiar, pero, al mismo tiempo, actuemos para cambiar cosas en beneficio de todos. No justifiquemos nuestras actitudes beligerantes o poco claras, porque lo hacen otros.
A los que mueven los hilos en el mundo material, les interesa que el pueblo se distraiga, identificándose con uno u otro color, con tradiciones enfrentadas y caducas, con críticas hacia el poder, con el deporte líder ...; interesa que el pueblo “juegue” a todo eso y aparte su atención de hechos básicos que atentan contra la dignidad y el respeto hacia la vida humana. Crear conflicto refuerza nuestro ego, nos mantiene en baja vibración y nos distrae de lo Auténtico.
El egocentrismo es el elemento común en toda batalla de ideas; cada quien defiende sus razones, sin embargo, el único ganador es el ego, éste gana todas las guerras.
Vivimos en un mundo ilusorio y todo eso a lo que le damos tanta importancia pasará, todo pasa, pero eso no quita que, aquí y ahora, actuemos de forma distinta, proyectando el bien del conjunto.
¿Crees que cambiaria algo si nos aplicáramos lo que exigimos a los demás? Seguro que sí, pero la mayoría sigue criticando al mando y haciendo lo mismo en pequeña escala.
En estos momentos, creo que lo único que nos puede ayudar es mirar hacia adentro, buscar dentro de nosotros esa honestidad innata que todos poseemos. Vivimos lo que necesitamos vivir, y, si lo hacemos de forma consciente, pasará y no necesitaremos repetir la experiencia. Sé honesto con lo que es tu deber en la sociedad, busca siempre el bien común y “da a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César”.
Todo por lo que sufrimos, guerreamos y nos enfermamos, pasa, ya que es ilusorio, así es que intenta estar en tu Ser, dedica tiempo a lo Auténtico y Verdadero, porque el dolor, así como el placer se pasan el testigo constantemente en el plano material. Todo pasa, excepto lo que Es.

EJERCICIO PRÁCTICO:
Busca tu instante Santo, intenta cada día buscar refugio en tu Ser, lo único que Es, lo que no pasa.
Siente tu respiración, tu corazón.
Date tiempo respira y observa. ¿Sientes en ti alguna sensación de sufrimiento o dolor?
Observa y determina si es por causa física, emocional o mental.
Una vez determinada la causa, no evites la sensación, vívela lo más intensamente que puedas, respira y siente ese dolor o sufrimiento, recitando mentalmente la frase: - Esto también pasará, esto también pasará -
Por último, cuando te sientas más aliviado: - Esto ya pasó, por bien mío y de mi entorno - y da las gracias.
Quédate en silencio unos momentos, solo en tu Ser

Muchas gracias por tu atención.