PROYECTOR INTERNO

Si estas en el centro todo fluye, eres simultáneo con tu conciencia, estás en presente. Tu pensamiento, sentimiento y acción son uno, te abres al contacto con la Fuente Original, tienes conciencia de ti mismo, te sientes unidad de conciencia.
Sin embargo, cuando te identificas con tu pensar/sentir/hacer, no estás en equilibrio, te dejas arrastrar hacia dicha identificación, te desplazas, pierdes equilibrio.
La Fuente de Luz en nosotros es el instante presente, ahí se ilumina la sombra. Tu corazón es como un proyector: no es la luz, pero deja que pase a través de él.
Cuando estamos presentes somos plena transparencia que se irradia y se nos revela en nuestra vida cotidiana.
Imagina, pues, que tienes un centro de conciencia que parte del corazón. Ese centro es un proyector que permite la expansión de la luz; como cuando se abre una flor, los pétalos son rayos de la conciencia.
Pues bien, la corriente de vida, esa luz del Ser, asciende a nuestro corazón, ahí llega el hilo de la vida, la conexión a la Fuente transpersonal, que a través de mi proyector particular impulsa la luz en diversas direcciones.
¿Mantienes limpio el proyector? ¿Es coherente esa luz? ¿Es una luz beneficiosa y transparente?
Dependerá (no importa la experiencia que vivamos) de si nos mantenemos centrados en el presente. A veces queremos ayudar a los demás o a nosotros mismos, pero no estamos alineados, predominan pensamientos y/o sentimientos de inseguridad, nuestro proyector esta opaco.
Sin embargo, si respiramos y nos alineamos en el instante, entonces nuestro proyector tendrá la máxima transparencia, irradiaremos una luz de alto nivel vibratorio, beneficioso para nosotros y para el mundo.
 
EJERCICIO PRÁCTICO:
Decide aceptar la incertidumbre en tu vida, si tomas esa decisión te sentirás en paz sea cual sea la experiencia que vivas.
Busca tu espacio y tu instante, busca tu quietud, atención a tu cuerpo, atención a tu respiración.
Observa la alineación que se produce física-emocional-mental, siente el presente, este es tu instante, no existe nada más. Silencio mental, observación.
Ahora lleva la atención a tu corazón, como si de una piedra preciosa se tratase. Observa su color y su brillo, deja que se produzca la conexión con la Fuente Original. Si no hay identificaciones cuerpo-mente, el hilo de la conciencia fluye a través de ti, tu proyector es transparente y deja pasar la Luz Clara de la Realidad, siente la Unidad para bien tuyo y de la humanidad, sin palabras, sin peticiones. Silencio.
 
Muchas gracias a todos.