¿ERROR?

La ignorancia de lo que somos es lo que nos ha llevado al único “error” (pero no es tal),  que nos ha llevado al sufrimiento, al apego, al dolor, a la guerra, a la aversión,... Ese “error” es la creencia en la separación.
Sin embargo, la separación es simplemente la falta de incorporación de una realidad que vive en nosotros, que es parte de nuestro ser y de la cual somos ignorantes.
La paradoja es que somos indivisibles de esa realidad ignorada y eterna. No hay tal separación: tu no desapareces porque desaparezca tu cuerpo; la muerte no es una separación, es una continuidad; todo esta unido, todo se corresponde, es una Ley Universal, todo es un encadenamiento, nada desaparece del todo; incluso el transitorio mundo del nacimiento, el envejecimiento, la enfermedad y la muerte, deja una huella, deja un registro, el cual (si eres consciente), es equilibrado y centrado y puede servir de guía coherente a los que te siguen, no importa lo que hayas vivido, sino como, lo has vivido.
Quizás en un punto del camino, algún día sientas que no hay error, que todo lo vivido, sea lo que sea, ha sido necesario para tu evolución, para tu despertar, por lo tanto, lo bendices ya que toda tu experiencia de vida ha sido adecuada y justa.

EJERCICIO PRÁCTICO:
Siente tus instantes de quietud, de silencio, de observación de ti mismo y de tu vida, sin incorporar juicios de valor, sin críticas.
Siente que no hay separación entre tu y tu entorno, entre tu y los que te rodean, siente la conexión en el espacio entre las formas.
No importa que objetivamente veas separación, basta con que creas que todo es una Unidad manifestándose en formas diversas.
Toda tu experiencia vivida es, ha sido y será, adecuada y justa para ti, y en este momento de interiorización, lo agradeces y bendices.
Silencio.

Muchas gracias por tu atención.